Estereotipos y exclusión

Helena Climent
El periódico ABC divulgó, el pasado 27 de septiembre de 2016, un artículo en el que hace eco el libro Reorganizarte de la autora, Cloti Martínez. Tanto el libro como el artículo anclan a la mujer en el tradicional estereotipo de encargada de las labores del hogar y de la crianza de los hijos. Este artículo se publicó en en el apartado Familia-Vida Sana con el titular “Trucos para no convertirte en una madre «madriguera» y para su análisis se ha empleado la Guía de género y comunicación de la Generalitat Valenciana y Guía de comunicación no sexista de la UJI .
En primer lugar, el hecho de que el periodista nombre sólo a la madre provoca una exclusión sobre la parte masculina, ya que estas situaciones se pueden dar tanto en el caso del hombre como de la mujer. Por otro lado, el uso del término “madriguera” para referirse a una madre comunica que ésta adquiere un rol negativo en la sociedad. Tal y como indica la Guía de comunicación no sexista de la UJI, se hace un tratamiento discriminatorio de las mujeres a través del lenguaje, dado que se asocia lo femenino con valoraciones peyorativas.
Además, la fotografía que acompaña a la información favorece a transmitir estereotipos sexistas, a que se estanque el avance de la mujer en la ciudadanía, así como se perpetúe el posicionamiento que tiene el sexo femenino mundo.
"Una educación sexista es aquella en que existe una clara y rígida división entre lo que se espera de los hombres y de las mujeres de acuerdo a las generalizaciones o estereotipos presentes en una sociedad o cultura determinada. Es decir, una educación basada en los estereotipos de género. El predominio de un género sobre otro". (Guía de género y comunicación de la Generalitat Valenciana)
En una de las ocasiones en las que se “favorece” al rol de la madre en este texto es en la afirmación “no tratan de aprovecharse de los padres, solo es que no caen en la cuenta de que sus cosas pueden molestar y ya se sabe, los padres hacen cualquier sacrificio por sus hijos”. En este caso, la madre va incluida en el masculino genérico “padres”. Lo que desencadena el uso de este tipo de sustantivos es la consolidación de las sociedades patriarcales. En este caso, tal y como indica la Guía de comunicación no sexista de la UJI se está llevando a cabo la invisibilización de las mujeres a través del lenguaje, ya que se oculta a las mujeres o se obstaculiza su identificación.
Por último, y siguiendo el mismo patrón, para referirse a los sucesores se utilizan enunciaciones de la autora del libro, en las que ella misma emplea la palabra “niño” o “chicos”. Por ejemplo, los chicos no van a volver a vivir en la casa familiar o Pero al final, se les acaba yendo de las manos y van repartiendo las cosas como pueden por los armarios hasta que al final las cosas del "niño" están por todos lados y se está comiendo su voluntad. Este es un ejemplo más de cómo este artículo utiliza un lenguaje sexista que tiene como resultado la discriminación de la mujer en la sociedad.
